Coracopsis vasa 2022


CORACOPSIS VASA

Loro Negro de Madagascar
Francisco Javier Rodríguez Penedo

Breve introducción sobre los Coracopsis vasa que será documentada con pesajes de huevos desde el primer día, perdida de humedad, pesajes de crías y otras peculiaridades de esta especie tan fascinante como desconocida en lo que se refiere a pruebas documentales. Añadiremos videos de diferentes etapas.

Mi corta experiencia en la cría, pero a la vez dilata experiencia en mi empeño de criar con los Coracopsis Vasa empieza en los año 1990/1991 cuando al visitar el aviario de mi buen amigo Antonio Sartal Lubian veo por primera vez una pareja de lo que desde entonces se convirtió en una pasión por esta variedad de loros. Fue un flechazo a primera vista y es que los Vasas gustan o no gustan ya desde un inicio. Carente de toda colorido típico de los cualquier especie de loros es de color totalmente negro, si bien en las diferentes épocas o estados su tonalidad es diferente; Negro azabache intenso en periodos de celo, negro plateado antes del celo y negro amarronado el resto del año, colorido que cambia sin tener que cambiar la pluma. Fue tal la atracción que tenía con esta especie que mi buen amigo Antonio Sartal me cedió una de sus parejas a fin de intentar la cría en diferentes lugares y con diferentes métodos ya que el tenía ejemplares desde hacía años y a pesar de entrar en celo nunca había conseguido criarlos.

Así empecé en el año 2000 con una pareja que fue albergada en jaula de 2 metros de largo x 1 metro de ancho x 1 metro de alto, provista de un nido horizontal dividido en su interior por una tabla a modo de cámara de 60cm de ancho x 40 x 40cm.

Coracopsis nigra

Mi pasión por esta variedad me hizo buscar y leer todo lo que tenía al alcance en relación a la especie, coincidiendo todas las publicaciones en que es el mas prehistórico de los loros tanto en comportamientos como principalmente en estados de celo, copulas y otros. Originario de Madagascar existen 4 subespecies que se diferencian principalmente en el área de distribución, pequeños matices en la coloración y diferencias en tamaño. No debemos confundir o incluir a la especie Coracopsis nigra de marcadas diferencias respecto a los vasas principalmente en tamaño, forma, aunque en algunos aspectos como cortejo, copulas y costumbres es prácticamente la misma.

Macho izquierda hembra derecha (Noviembre/2021) Macho izquierda hembra derecha (Febrero/2022)
Macho izquierda hembra derecha (Abril/2022) Hembra totalmente en celo (Junio/2022)

El Coracopsis vasa mide aproximadamente 50 centímetros las hembras son quizás algo mas grandes si bien no es una característica primordial. El pico durante todo el año es de color negro como su plumaje si bien a medida que avanza el celo se le va poniendo de color blanco hasta un blanco marfil impoluto. Las hembras tiene el pico mas estrecho en su base y con menos curvatura, cuestión esta que cambia radicalmente cuando están en celo o criando ya que el pico es muchísimo más ancho en la base e  incluso tiene como dos comisuras o protuberancias a ambos lados. Otra de las características que marca significativamente esta especie es precisamente la cantidad de cambios que efectúa en su cuerpo aparte de en el pico en el proceso de celo y cría:

  • A medida que avanza el celo comienza a caerle la pluma de la cabeza llegando a quedar totalmente desplumadas en la cabeza y parte del cuello.
  • El color de la piel en cabeza, cuello y garganta pasa de un color carne a un color amarillo intenso.
  • Comienza a emitir chillidos bastante estridentes y fuertes repetidos durante todo el día e incluso en pleno apogeo del celo durante la noche. Una de las consecuencias de estar chillando durante largo periodos es que se le forma como un “colgajo de piel” en la garganta.
  • Durante estos días la hembra comienza a perseguir al macho por la jaula solicitando comida al macho o grupo de machos e incluso los acosa y persigue de una forma agresiva por toda la jaula. Durante el celo y la cría la hembra ejerce un papel TOTALMENTE dominante respecto del macho o machos que pudiesen estar próximos o cortejándola.
  • La cloaca sale al exterior en forma de bolsa, bolsa que se apertura mostrando al exterior los órganos reproductores totalmente desplegados en el exterior de la misma.
  • Tienen un movimiento muy peculiar que en todas mis hembras llegue a observar y es la forma de incitar al macho a que les regurgite comida, comienzan a emitir repetidos y estridentes chillidos picoteándose un ala y levantando la cola, a lo que los machos suelen tardar escasos segundos en colocarse al lado cebando la hembra.
  • En estado silvestre o en cautividad se puede criar tanto con una pareja que este suficientemente probado que son pareja. Como por 2, 3 o incluso 4 machos con la misma hembra. Todos ellos se van a asomar a la entrada del nido sin llegar a entrar para dar de comer a la hembra, que permanece continuamente en el nido saliendo exclusivamente para comer, defecar y copular. Todos los machos cebaran a la hembra incluso llegando a copular todos ellos si bien al igual que ocurre con los eclectus, se sospecha que solo uno llegara a ser el padre de sus crías.
  • El periodo de celo es un estado de constante atención de los machos ya que las hembras los acosas solicitando comida y copula, llegando a copular en un día mas de 14 veces. Copulas que se alargan durante espacios de 30/40 minutos donde macho y hembra se quedan pegados como ocurre con los perros.

En el caso de los machos el proceso es diferente. Suelen permanecer atentos y vigilantes a los embistes de las hembras buscando la copula. El color general del plumaje es en esos momentos un negro azabache y también suele ponerse la piel amarilla aunque al no perder las plumas de la cabeza solo es visible alrededor de los ojos. Los machos al igual que las hembras en estado de celo sus órganos reproductores le salen al exterior en algo que también podríamos denominar como una bolsa prominente que cuelga de la cloaca. Esta bolsa al dilatarse los órganos masculinos se contrae y se puede observar como cuelga un órgano masculino prominente.

Las copulas empiezan con un cortejo que lo denominaremos como el baile de los cuellos. El macho comienza a cebar a la hembra regurgitándole comida a gran velocidad en movimientos muy rápidos de cuello a lo que continua después de una serie de 6/8 movimientos el macho gira el cuello alrededor de la hembra y la hembra procede de igual forma para seguir dándose de comer en movimientos rápidos. Esta serie de movimientos los realizan durante un periodo de 4/5 minutos mientras la hembra levanta la cola y el macho intenta copularla situándose parcialmente encima de ella e introduciendo el falo en el órgano reproductor de la misma. Son los únicos loros que la copula se realiza con los órganos reproductores en el exterior y penetrando el macho a la hembra. Tengo observado y grabado parejas copulando y se quedan enganchados como pudieran hacer los perros durante un buen rato de tiempo. Durante este proceso el macho y la hembra no paran de moverse y gemir. En esos momentos son totalmente vulnerables y no atienden a nada de lo que pudiera ocurrir en el entorno estando centrados exclusivamente en la copula. Es frecuente observar como ejemplares copulan durante mas de 45 minutos seguidos y llegue a contar en días de 14/16 copulas al día de los tiempos indicados.

Pero los Coracopsis tienen otras peculiaridades únicas como son:

  • Realizan una sola puesta al año de 3 o 4 huevos y si retiramos los huevos esa puesta puede alargarse en algunos huevos mas siendo raro que finalizada la puesta vuelvan a realizar otra.
  • La incubación dura entre 16/18 días frente a los 24/26 de otras especies incluso de menor tamaño de psitácidos, lo que es muy similar en incubación a canarios ya que incluso los periquitos ondulados incuban mas días. Curiosamente es la hembra en solitario quien realiza el proceso de incubación sin que el macho entre en el nido. Las hembras durante esos periodos son Extremadamente agresivas con todo lo que rodea la proximidad del nido, siendo unas madres excepcionales en el cuidado y protección de los nidos. Sin duda un proceso asombroso en el desarrollo del huevo que suele oscilar entre los 24/28 gramos.
  • Es muy común y dado el tamaño de los huevos que las hembras padezcan retención a la hora de la puesta quizás por la necesidad de mas calcio de lo normal en otros psitácidos por su (llamémoslo) transformación fisiológica y el tamaño de los huevos que suelen ser también de una cascara muy dura.
  • Las crías al nacer tienen unas protuberancias a ambos lados del pico lo que nos indica la necesidad de utilizar nidos muy profundos. Esas protuberancias desaparecen aproximadamente a los 24/28 días. Cuellos estirilizados, patas muy largas y unas crías hiperactivas que solicitan encarecidamente comida a todas horas. Curiosamente en dos meses están totalmente plumados llegando a salir del nido y durante un corto espacio de días sigue alimentándolas su madre.
Hembra Coracopsis vasa periodo de celo y cría.  A destacar las camisuras o protuberancias a ambos lados del pico, curbatura del mismo y anchura en la base así como la piel que cuelga del cuello como consecuencia de chillar incesamente todo el día.

Incapacidad para poner el huevo

 

Otra característica que estamos observando que los hace ser ejemplares únicos durante el celo las hembras chillan incluso en la noche. La piel de la cabeza se le vuelve de color amarillo en la hembra y curiosamente entre hembras la agresividad es grande si están en el mismo recinto y no pueden volar para escapar. Una de las hembras, llamémosla la MADRIARCA, copula con uno o varios machos y el resto de las hembras próximas no suele criar aunque estén totalmente en celo (cabeza desplumada …). Estudios realizados por varios compañeros nos vienen a demostrar que parejas que estén en jaulas contiguas o próximas donde puedan verse solo una pareja criara mientras los chillidos de la hembra que está precisamente criando se hacen mas repetitivos y estridentes. Por lo que se deberían de colocar a cierta distancia unas parejas de otras estimulándose unas a otras con los chillidos, pero con cierta distancia.

En mi caso dispongo de 6 parejas. Tres de ellas están en jaulas contiguas sin verse unos a otros. Dos parejas son reproductoras probadas. La tercera pareja está compuesta por una hembra de 5 años y un macho de 4 años. Las tres mostraron todos los indicios de estar en celo llegando a copular ambas parejas, pero en un periodo de 2 años solo 1 crio y curiosamente la misma. A 5 metros sin que se vean hay otras dos parejas. Una adulta que puso huevos sin fecundar. La segunda pareja tiene 1 año. Y a 5 metros en el otro extremo del aviario está la sexta pareja y al lado una pareja de Coracopsis nigra. Esta pareja después de 17 años en mi casa, este año por fin puso huevos aunque no los veo tan activos en las copulas como las otras dos. 3 huevos los puso fuera del nido. Coloque otro nido en el otro extremo de la jaula e introducir un huevo plástico dentro del primer nido. Conforme ponía huevos se los retiraba para incubar artificialmente hasta verificar que estuviesen fértiles. Desafortunadamente ninguno de los 9 huevos lo estaba. Lo que refuerza nuestra teoría de una hembra MATRIARCA en la zona y el resto de hembras aunque inicialmente desarrollan todo el proceso de la cría o no ponen o ponen huevos infértiles, pero el celo de una de ellas y los chillidos incita al resto de su contorno a estimularlos en el celo. Curiosamente la pareja de Coracopsis nigra cuando las hembras de vasa chillan hace lo propio y este año por primera vez tiene un celo que hasta la fecha en 7 años que están en casa no lo vi nunca. Lo mismo ocurre con dos machos que tengo sueltos de la misma especie (Coracopsis nigra) que están en jaulas próximas pero independientes una de otra, llegando a tener un celo los machos que jamás lo había visto en los Coracopsis nigra con los órganos reproductores totalmente desplegados en el exterior.

Diferentes periodos de crías Coracopsis vasa

Los Coracopsis vasa y Coracopsis nigra como indicamos al comienzo de este escrito son variedades endémicas de Madagascar estando en un proceso de declive ambas especies por la acumulación de factores como son la deforestación que está sufriendo Madagascar, la proliferación de animales invasores como son ratas que acaban con las crías en los nidos, la falta de hábitats donde puedan tener acceso a alimentación, nidos … la dificultad en que se críen y que las poblaciones se repongan es cuando menos un problema acuciante en libertad.

En cautividad tiene quizás más problemas. La falta de ejemplares. La dificultad en la cría. El haber pocos aficionados que los tengan y que muestren un claro interés por conservar la especie, estos factores están haciendo que todavía en cautividad tenga más problemas que en libertad, que ya es difícil.

En España que tenga constancia existen 3 centros destacados donde hay un buen reservorio de ejemplares. Un compañero tiene una pareja y sus 8 crías. Loro Parque tiene un grupo de XXX ejemplares y yo tengo 16 ejemplares entre los que apenas existe consanguinidad. Hay mas compañeros que tienen ejemplares: 1 Pareja en Zaragoza, 1 Murcia, 1 Valencia, 1 Barcelona y que tenga constancia no existen más ejemplares.

Extrapolando estos datos vemos que en Europa es algo muy similar la cantidad de ejemplares pertenecientes a colecciones privadas destacando algunos ejemplares en Portugal, Francia, Alemania, Italia y Holanda. Si bien la cantidad de ejemplares repartidos nos ofrece un panorama muy similar al que tenemos en España.

Mi empeño en hacerme con ejemplares de Coracopsis vasa y Coracopsis nigra es algo más que una pasión que siento por estas especies, es un intento de construir un proyecto serio de cría en cautividad con consanguinidad cero, la publicación de todo tipo de información sobre los procesos y el disponer de un reservorio en cautividad de estas especies que pueda valer para ayudar a su conservación en libertad es quizás un sueño que estoy haciendo realidad. No es mi intención desprenderme de ejemplares más que para compartir con los compañeros que puedan sentir esta misma pasión por estas especies y disponer de más puntos distribuidos por España o Europa evitando concentraciones que pudieran sufrir algún percance al estar todos los ejemplares localizados en el mismo centro de cría.

El CORACOPSIS VASA y CORACOPSIS NIGRA es quizás el psitácido mas prehistórico del que no paramos de aprender y sorprendernos teniendo en nuestras manos un proyecto de futuro que tiene un horizonte claro en manos de los AVICULTORES que somos quienes realmente tenemos esa pasión y experiencia que ningún proyecto de conservación establecido por entidad Gubernativa podrá tener nunca. EL ÉXITO ES PARA QUIEN LO VIVE Y TRABAJA, NO PARA QUIEN VIVE Y SE FINANCIA DE EL.

Mi agradecimiento a:

Antonio Sartal Lubian (Poio), Enrique Pérez Pereiro (Vigo), José Doval Ucha (Porriño), Javier Pérez Docampo (Vigo), Jorge Voelt (Brasil), Vitor Januario (Portugal) y Nuhacet Fernández Gallardo (Tenerife) y Tony Silva (Miami) por ayudarme a que este sueño fuese realidad y los CORACOPSIS VASA tengan la denominación de origen GONDOMAR.